El joven japonés Sugiyama decidió
someterse a una operación para deshacerse de sus genitales pocos días
después de su cumpleaños 22, el pasado mes de abril.
Pero, en vez de deshacerse de sus partes, las puso en venta en Twitter por la suma de 100 mil yenes (alrededor de 1250 dólares). El “aviso” llamó tanto la atención, que Sugiyama quiso cambiar su destino.
Así, congeló su pene cortado, sus testículos y la
piel del escroto y organizó un banquete donde sus partes, condimentadas
con champignones y perejil, constituyeron el plato principal.
A la fiesta asistieron cientos de personas, pero sólo cinco fueron los asquerosos que se animaron a probar el plato. El resto curioseó, se divirtió y escuchó algo de música.
La celebración fue denunciada a las autoridades japonesas, pero no intervinieron al considerar que cocinar pene y consumirlo no es un acto ilegal.
Sugiyama además fotografió cómo quedaron los platos y luego subió las imágenes a Internet, que por respeto a usted lector, decidimos no publicar.
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