sábado, 2 de junio de 2012

Consejos Para Llegar Juntos Al Orgasmo ¡no Te Los Pierdas! Cool

“Una pareja que se entiende bien en la cama llega al mismo tiempo al orgasmo”. Esa aseveración es un mito. En realidad sólo dos de cada cinco parejas consigue lograr esta hazaña de forma regular, sin embargo quienes lo han experimentado expresan una suerte de comunicación corporal y mental divina que los acerca más da fe de un placer superior.

Entre la eyaculación precoz de muchos hombres y los orgasmos tardíos de otras tantas mujeres, se hace difícil imaginar cómo podemos lograr el orgasmo al mismo tiempo que nuestra pareja. Sin embargo el sexo es un engranaje, y mientras mejor conozcamos los gustos de la pareja y los propios podremos movernos en la dirección deseada.

Para muchos el orgasmo es la meta y se olvidan de que, verdaderamente, durante todo el acto se encuentran disfrutando juntos y el orgasmo solo representa un escalón más en la escala de placer.

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Muchas veces, tanto el hombre como la mujer piensan sólo en su satisfacción y se olvidan de que es importante que el compañero o la compañera se sientan satisfechos. La comunicación en estos casos es fundamental, siempre se debe tener claro qué es lo que los dos disfrutan.

Una de las circunstancias más comunes que las parejas viven, es el de llegar al orgasmo en diferentes momentos. Se ha creído que esto es un problema, pues uno de los dos termina y ya quiere descansar mientras el otro apenas va entrando en calor.

Es probable que las películas y novelas hayan sembrado en nuestra mente la concepción de que el orgasmo simultaneo es la clave del sexo perfecto y, por cursi que suene, hasta de “hacer el amor”. Conocer nuestro cuerpo y el de nuestra pareja se convierte en algo imprescindible, ya que no todos somos iguales.

Atrévete a descubrir juntos las zonas erógenas de los dos, qué les gusta, que les da más placer, y de qué forma pueden llegar al orgasmo con más facilidad.

¿QUÉ PASA?

Las causas de esta circunstancia pueden ser varias. En primer término, puede existir en el caso del hombre la eyaculación precoz (eyaculación en los primeros dos minutos de la relación). Si este es el caso, pueden ir donde un experto para que recomiende ejercicios que ayuden a superar la disfunción, que es totalmente normal, en especial si es joven. En general, el hombre aprenderá a controlar su eyaculación mediante la masturbación, o haciendo pausas de 30 segundos durante el coito. Eso sí, el que el compañero supere cualquier problema depende también de la mujer, pues ésta debe darle la seguridad suficiente para que su psicología no lo traicione y que por estar tenso o nervioso se repita el problema.

Otra disfunción sexual, aunque no tan común, es la eyaculación u orgasmo retardado, donde probablemente los casos sean psicológicos y se requiera de mucha comprensión, hablar sobre el asunto, no sentir culpa, e incluso ir a terapia. También, puede ocurrir que aunque el hombre llegue al orgasmo no haya eyaculación. La manera más corriente de superarlo es alcanzando la eyaculación primero con la estimulación manual, luego mediante el roce con los labios vaginales y por último internamente. Si el problema persiste es mejor acudir donde un médico, pues puede haber razones físicas que estén influyendo.

De igual manera, la mujer puede presentar retardo de orgasmo, o incluso la ausencia. Aparentemente, en estos casos, las causas son psíquicas y provienen de relaciones fallidas, de prejuicios propios, o de una necesidad de no perder el control. También pueden ser físicas, por lo que siempre es recomendable ver al doctor. Ahora bien, de esto, en general, se le echa la culpa al hombre y no es siempre así. Claro que es común, dado que el compañero no tiene la suficiente sensibilidad para averiguar cómo es que le gusta a la mujer y por esto nunca llega al orgasmo, pero, al mismo tiempo, es importante que la mujer sea muy comunicativa y exprese lo que quiere. También es igualmente común que aunque se tenga al compañero ideal el orgasmo sea muy lento o no exista. La mejor opción en estos casos es recurrir a terapia y a prácticas eróticas de desinhibición y autoconocimiento como la masturbación, sola y acompañada, y la exploración de los puntos más sensibles en la mujer.

MENTE DESPEJADA

Olvídate de que tu propósito sea el orgasmo. Aunque cueste, el sexo no sólo es llegar al orgasmo, eyacular y ya. ¡NO! La relación física con otro cuerpo tiene que ser como comerse un rico manjar.Hay que olerlo, saborearlo, degustarlo y sentirlo antes de comértelo. Trata de disfrutar cada instante, desde que están con ropa hasta que el vestido natural de la piel sobresalga en la escena. Por ello deja a un lado el pensamiento de llegar al orgasmo, o de llegar junto a tu pareja. Déjate llevar.

Concéntrate en el placer que sientes y de hacer que tu pareja sienta con besos, caricias y palabras ese cosquilleo que recorre tu cuerpo. Por ello es vital que ambos se mantengan conectados todo el tiempo. Si estás conectado con lo que siente tu pareja, los momentos de mayor excitación del otro serán también los tuyos, y de esta manera sincronizar el orgasmo será mucho más sencillo.


PRELIMINARES

Regularmente siempre hay alguien en la relación que llega con mayor facilidad al orgasmo que el otro. Esto puede arreglarse respetando los preliminares. Con caricias y besos desde el pelo hasta la punta de los pies, recorriendo palmo a palmo cada centímetro de la persona que deseas. En las mujeres esto ayuda a facilitar la penetración, debido a que alcanza un umbral de excitación equilibrado con el del hombre, y en el caso del caballero permite estar en pie de guerra para la batalla.

Pero es necesario que el hombre controle el apetito excesivo, que en ocasiones provocan la eyaculación rápida o menos prolongada. Enfocarse en darle placer a ella en esta etapa podría ser una buena forma de despejar la mente.

De esta forma, controlando y equiparando la excitación de ambos es más fácil alcanzar el clímax en forma simultánea.

POSTURAS PARA LOGRARLO

Existen posturas óptimas para llegar antes al orgasmo. Aunque todo dependerá de nuestros gustos y preferencias, algo que debe ser respetado por la otra persona, pues pensemos que es un juego de dos y ambos buscan plenitud total.




Por detrás. Una de ellas es situarse boca abajo, algo así como “el perrito”, mientras que nuestra pareja se situará detrás de nosotros, con lo que ayuda mucho la estimulación de los genitales. Primero podemos jugar con rozarlo en nuestra parte trasera para posteriormente llegar a la penetración.

De lado. Acostarse de lado facilita la penetración rápida y segura del miembro masculino, llegando a una sensación de máximo placer. El hombre acariciará los pechos de la mujer con sus manos y rozará el cuello, antes y durante el acto.

De lado para finalizar abajo. Las posturas pueden entrelazarse y cambiarse en un mismo coito, siempre que ya se tenga algo de experiencia para no dar lugar a imprevistos. Por ejemplo, podemos empezar de medio lado e ir girando lentamente para quedarnos debajo y nuestra pareja detrás.


El hombre sentado y la mujer encima. Es una posición óptima para los que están empezando. Además de muy cómoda, permite estimular el clítoris con el contacto y las mujeres pueden llegar a tener multiorgasmos, lo que aumenta el placer y la excitación común. Sea en un sofá, una silla, la cama o bien otro lugar, el hombre se sentará y la mujer se colocará encima, de cara. El contacto es total y la estimulación de todas las partes erógenas se ponen en alerta.

Relaciones sexuales en lugares poco comunes. Vivir nuevas experiencias nos llevará al orgasmo deseado. Por ello, son muchas las parejas que prefieren “sorprenderse” y mantener relaciones en lugares no convencionales. En un parque, en la playa, en la montaña, en un baño público… Son situaciones en las que la pasión aumenta porque tenemos menos tiempo para dar rienda a nuestro sexo y nos excitamos rápidamente.


ALGUNOS TRUCOS

***La estimulación de la vagina debe hacerse antes de la penetración. Pueden ayudar los dedos o juguetes eróticos como los consoladores y otros artefactos que facilitan la penetración.

***El clítoris es una de las zonas erógenas de las mujeres; debe tocarse con suavidad, incluso durante el acto sexual.

***No te limites como mujer y juega con el miembro masculino. El sexo oral es una de las mejores formas para compenetrarse y descubrirse.

¿CONOCES TU PUNTO G?

Otra manera de llegar al orgasmo de una forma más cómoda es llegando al Punto G, que en el caso del femenino lo encontramos en la pared interior de la vagina y en el curso de la uretra. Podemos llegar a él con los dedos para poder tocarlo suavemente en forma de círculos.

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